GEORGIA CAMBIA EL DOLAR POR MONEDAS DE ORO Y PLATA


Desde el 1 de enero se podrá solo cancelar las deudas con el Estado de Georgia con monedas de oro o plata. descartando el uso del dólar.





COPENHAGUE A PUNTO DE FRACASAR




A pocas horas de que termine la esperada Cumbre sobre Cambio Climático de Copenhague aún no se sabe si los más de 110 líderes reunidos allí podrán llegar a un acuerdo para frenar el calentamiento global.

Tras dos semanas de intensas negociaciones, los delegados no lograron producir un acuerdo preliminar el jueves y el viernes por la mañana, una hora antes de que se reunieran los jefes de Estado, no había ningún texto que pudiesen discutir y firmar.

Después de expresar sus dudas sobre la capacidad de la comunidad internacional para iniciar una acción colectiva, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, urgió a los líderes a "actuar juntos" para combatir el cambio climático.


Muchos esperan que la presencia de Obama de un nuevo impulso al proceso de las negociaciones.
"Creo que podemos actuar de forma decisiva frente a esta amenaza común. Por eso he venido hoy aquí, no para hablar, sino para actuar", dijo el mandatario durante su discurso frente a los demás jefes de Estado.

Muchos esperan que la participación de Obama logre sacar a las conversaciones del punto muerto al que han llegado.

Durante el día -así como también desde que se inició la reunión dos semanas atrás- el ambiente en la cumbre ha oscilado entre el optimismo y el pesimismo, cambiando incluso radicalmente de un polo al otro en cuestión de horas.

He venido hoy aquí, no para hablar, sino para actuar

Barack Obama, presidente de EE.UU.
Las últimas noticias desde el centro de conferencias indican que las esperanzas de llegar a un acuerdo han comenzado a desvanecerse.

"La cumbre, esta mañana, es una cumbre en crisis", afirmó el director del Programa de Medio Ambiente de la ONU (UNEP), Achim Steiner.

Obstáculos en el camino
Los puntos más contenciosos para la concreción de un acuerdo siguen siendo los mismos que en un principio:

-Recorte de las emisiones de CO2: los países en desarrollo quieren que los países ricos recorten sus emisiones en al menos 25%, algo que rechaza la mayoría de estas naciones

-Verificación de los recortes: EE.UU. no aceptará recortes en las emisiones a menos que China haga lo mismo y deje que un organismo internacional corrobore que lo está haciendo.

-Fondo de adaptación para los países pobres: los países pobres quieren más dinero de lo que han ofrecido los países ricos (US$100.000 millones para 2020) y quieren ayuda directa. Los países desarrollados prefieren ayuda en forma de esquemas como los de compensación de carbono.

-Límite del aumento de la temperatura: países en desarrollo se oponen a que suba más de 1,5ºC, los países desarrollados se inclinan por 2ºC y más recientemente admiten que aumentará en 3ºC.

-Vigencia de Kioto: los países en desarrollo quieren que no se haga a un lado este protocolo, los desarrollados prefieren un texto nuevo.

Según señala uno de los corresponsales de la BBC en la cumbre, Matt McGrath, los delegados están trabajando en un texto para que firmen los mandatarios, pero, con las horas contadas, muchos dudan de que esté listo para el final de la cumbre.

Mientras tanto, continúan las protestas en las inmediaciones del centro de conferencias.
En teoría Obama parte de Copenhague a las 16:30 hora local y la ceremonia de cierre es las 17:00 horas, pero lo más probable es que no se cumpla ni con los horarios ni con los eventos previstos en la agenda y la reunión se extienda durante el fin de semana.

En caso de no lograr un acuerdo, está previsto reunirse en México el próximo diciembre. Es más, éste es uno de los temas que ya se está discutiendo cada vez más en los pasillos.

Sin embargo, esto significaría posponer una vez más una solución al calentamiento global que no se ha logrado frenar desde que tuviera lugar la primer reunión internacional sobre medio ambiente, en la Cumbre de Río en 1992.

RUSOS CONFIRMAN MANIPULACIÓN DE DATOS PARA EXAGERAR CALENTAMIENTO GLOBAL


Por James Delingpole
blogs.telegraph.co.uk

El Climategate acaba de conseguir algo grande. Y todo gracias a los rusos que, con el cronometraje perfecto, dejaron caer este obús cuando los líderes del mundo estaban en Copenhague para discutir las formas de imponer impuesto al carbono que nos llevará de vuelta a la Edad Media.

Fiesta para los ojos es este comunicado de prensa de Rionovosta, a través de la agencia Ria Novosti, publicada en Icecap. (Hat Tip: Richard Norte)

“El incidente ocurrido en noviembre de 2009 por el robo de e-mails del Climatic Research Unit, mencionado por algunas fuentes como “Climategate”, sigue como telón de fondo de la Conferencia del Clima de las Naciones Unidas en Copenhague Climático (COP 15) donde se intenta llegar a acuerdos alternativos para reemplazar al Protocolo de Kioto de 1997 destinado a combatir el calentamiento global.

El incidente involucró un servidor de correo electrónico utilizado por la Unidad de Investigación Climática (CRU) de la Universidad de East Anglia (UEA) en Norwich, Inglaterra Oriental. Personas no identificadas robaron y anónimamente distribuyeron miles de correos electrónicos y otros documentos relativos a la cuestión del calentamiento global realizados durante el curso de 13 años.

La controversia surgió después de que se formularan diversas acusaciones como que los científicos del clima se pusieron de acuerdo para suspender las pruebas científicas y manipulando datos para que el calentamiento global pareciera más grave de lo que es en realidad.

Climategate ya ha afectado a Rusia. El martes, la sede en Moscú del Instituto de Análisis Económico (AIE) publicó un informe afirmando que el Centro Hadley para el Cambio Climático en la sede de la Oficina Meteorológica Británica en Exeter (Devon, Inglaterra) probablemente había manipulado datos sobre el clima de Rusia.

La AIE cree que los datos rusos de la estación meteorológica no justificó la teoría del calentamiento global antropogénico. Los analistas dicen que las estaciones meteorológicas rusas que cubren la mayor parte del territorio del país, y que el Centro Hadley había utilizado solo el 25% de los datos de las estaciones de este tipo en sus informes . Más del 40% del territorio de Rusia no se incluyó en los cálculos de la temperatura global por otras razones, más que por la falta de estaciones meteorológicas y observaciones.

Los datos de estaciones ubicadas en zonas no incluidas por la Unidad de Investigación Climática de Hadley temperatura Reino Unido (HadCRUT) no muestran ningún calentamiento considerable desde finales del siglo 20 y comienzos del siglo 21.

La base de datos de HadCRUT específica que incluye datos incomplentos de las estaciones para destacar el proceso del calentamiento global.

En general, los climatólogos utilizan los resultados incompletos de estaciones meteorológicas con mucha más frecuencia que los que proporcionan las observaciones completas.

Los analistas de la AIE dicen que los climatólogos utilizan los datos de estaciones ubicadas en los grandes centros poblados que están influenciados por el efecto del calentamiento urbano con más frecuencia que los datos correctos de las estaciones remotas.

La escala del calentamiento global era exagerada debido a las distorsiones de la temperatura para Rusia, el 12,5% de la masa terrestre del mundo. La AIE dijo que es necesario volver a calcular todos los datos de la temperatura mundial a fin de evaluar la magnitud de tal exageración.

Los datos globales y las temperaturas tendrán que ser modificadas si los procedimientos hasta la fecha del clima han sido usados por otros datos nacionales porque los cálculos usados por analistas COP15, incluso cálculos financieros, están basados en la investigación de HadCRUT.”

Lo que los rusos están sugiriendo aquí, en otras palabras, es que todo el registro de la temperatura global utilizados por el IPCC para informar a los gobiernos del mundo es una estupidez.

Cuando Richard North dice: Esto es consecutivo.

ACTUALIZACIÓN: Como los informes de Steve McIntyre en ClimateAudit, hace tiempo que se sospecha que el CRU había estado jugando con los registros de la temperatura en Rusia – más concretamente de Siberia – . Aquí a partir del marzo de 2004, es un correo electrónico de Phil Jones a Michael Mann.

“Rechazó recientemente dos documentos (uno para JGR y para GRL) de la gente diciendo que la CRU se equivocó en Siberia. Fue a la ciudad para hacer ambos exámenes, esperamos que con éxito. Si aparece voy a estar muy sorprendido, pero nunca se sabe con GRL.
¡Salud!
Phil

Y aquí uno de los comentaristas comenta sobre la forma en que los datos han sido utilizados con fines políticos:

“El quid del argumento es que la CRU recogió los datos con los mismos métodos que se han hecho en todas partes. Se hizo caso omiso a datos que cubren el 40% de Rusia y se eligió datos que mostraron una tendencia al calentamiento sobre las alternativas estadísticamente preferible que estén disponibles. Hicieron caso omiso de la integridad de los datos, prefirieron los datos urbanos, los datos de una marcada preferencia de las estaciones, la longitud fue ignorado en el conjunto de los datos.

En la página final, hay una carta que muestra que el uso selectivo del CRU del 25 % de los datos hizo subir en 0.64C grados de más calentamiento. El juego completo muestra datos de una subida de 1.4C desde 1860, los del CRU pusieron 2.06C de subida durante el mismo período.”

No, por supuesto, queridos lectores que estoy de ninguna manera tentado a cantar acerca de estas últimas revelaciones. Después de todo, se que muchos de mis colegas, junior y senior, han estado apoyandose en mí sobre esto hasta el cuello ….

BXVI, LA RELIGION DEBE TENER SU LUGAR EN CADA PAÍS

VIDEOS SOBRE LOS ALIMENTOS TRANSGENICOS!!!!!





INGLATERRA: AGENTES ANTITERRORISTAS BUSCAN SIGNOS TEMPRANOS DE RADICALIZACIÓN EN LOS JARDINES INFANTILES


Begoña Arce
17/12/09

La semilla del terrorismo puede esconderse entre pañales. En la mente de una niña o un niño de corta edad quizás germine el extremismo y la violencia. La policía británica no se deja engañar por la talla de ciertos sospechosos, a los que tiene bien vigilados. Una de las misiones más surrealistas de los 21 agentes de las fuerzas antiterroristas de las West Midlands, en el centro de Inglaterra, es visitar las guarderías.

A los miembros de esa fuerza de élite les interesa saber si a algún mocoso se le ha ocurrido pintar alguna vez una bomba o contar cuánto quieren en casa a Bin Laden. «Las pruebas sugieren que el radicalismo puede empezar a los 4 años», alerta un agente en un correo interno publicado por el diario The Times.

El remitente, convencido de que las raíces del mal crecen muy pronto, solicita a los cuidadores y trabajadores sociales que «informen sobre las personas de cualquier edad que hayan podido ser radicalizadas o corren peligro de serlo».

Adoctrinamiento paterno

Cuando Arun Kundnani, portavoz del Instituto para las Relaciones Raciales, quiso comprobar la veracidad de la historia, llamó a la policía y esta, a su vez, se sorprendió de su asombro. Al agente con el que habló le parecía de lo más normal que las fuerzas antiterroristas supervisen a los críos. «Me dijo que no era solo él o su unidad la que lo estaba haciendo. Parece que se pide a los maestros que observen signos de radicalización», ha comentado Kundnani.

Los que justifican esa estrategia de vigilancia precoz recuerdan cómo un terrorista de la zona de Birmingham, Parviz Khan, fue filmado cuando adoctrinaba a su hijo utilizando antiguos métodos de las escuelas británicas, como el cachete o el regletazo. «¿A quién amas?», preguntaba Khan. «Amo al jeque Osama bin Laden», respondía el chico prudentemente.

Andy Hayman, uno de los antiguos jefes del Departamento de Operaciones Especiales de Scotland Yard, ha puesto el ejemplo de una niña de 20 meses, que en una manifestación en Londres llevaba un gorro de lana blanco con la leyenda: «Amo a al-Qaeda». Cuando su padre fue juzgado más tarde por varios delitos de terrorismo, el convicto proclamó ante el tribunal que su hija era «el miembro más joven» de la organización islamista. Los padres, ya se sabe, siempre quieren ser un ejemplo para sus vástagos.

La operación de vigilancia está dando frutos. Un chico de 7 años, sin ir más lejos, ha sido incluido en la lista de 228 personas identificadas como vulnerables al extremismo. ¿Está realmente justificada la vigilancia de guarderías por el peligro potencial de un lavado de los cerebros infantiles? «Es una pérdida absurda de tiempo», opina el diputado liberal Chris Huhne.

Y el absurdo no solo afecta a los niños. Todo el que lleve una cámara en la mano corre el riesgo de que le caiga encima la legislación antiterrorista y su famosa sección 44, que permite detener y registrar a cualquiera, en plena calle, sin necesidad de explicaciones.

Borrar fotos

Recientemente algunos turistas han pasado un mal rato cuando un policía les prohibió sacar fotos de lugares de Londres tan populares como Trafalgar Square, el palacio de Buckingham o Westminster. El austriaco Klaus Matzka vivió uno de estos incidentes en carne propia. En nombre de la prevención del terrorismo, un agente le obligó a borrar las fotos que había tomado de uno de los famosos autobuses rojos de dos pisos, mientras le pedía el pasaporte y la dirección del hotel.

También tuvo que enseñar la documentación un periodista de la BBC que estaba fotografiando la Catedral de St. Paul. Y Grant Smith, con 20 años de profesión a las espaldas y trabajos de documentación para Norman Foster y Richard Rogers, acabó rodeado por siete agentes y conducido al furgón policial cuando tomaba imágenes de una iglesia.

Los reporteros gráficos están tan hartos del acoso que han lanzado una campaña, con más de 4.000 seguidores, bajo el eslogan: «Soy un fotógrafo, no un terrorista». Los mandos policiales achacan parte del problema al desconocimiento de la actual legislación por parte de sus propios agentes. Una ignorancia que no hace más que agravar las cosas.