CALIFORNIA PIDE AYUDA A WHASHINGTON PARA RECATE


S. POZZI - Nueva York - 26/12/2009
La situación fiscal de California, con un déficit de 21.000 millones de dólares (1.462 millones de euros), vuelve a ser desesperante. Y al ritmo en el que se degradan sus cuentas públicas, a pesar de los masivos recortes presupuestarios, alza de impuestos y las ayudas a estimular la economía, la Casa Blanca no va a tener otra que salir en su rescate.

Así lo va a solicitar a Barack Obama el gobernador republicano Arnold Schwarzenegger, que necesita ya 8.000 millones para poder seguir llevando adelante programas sociales vitales para millones de familias que sufren el golpe de la crisis, según informa Bloomberg. Es la patata caliente con la que va a tener que lidiar Washington en 2010.

Los detalles de la llamada de auxilio los dará a conocer en su discurso del 6 de enero, dos días antes de que haga público su último presupuesto al frente del Estado. Arnold Schwarzenegger escribió ya a la líder demócrata en el Congreso de EE UU, Nancy Pelosi, pidiendo que se movilicen con urgencia fondos federales. Si no, advierte, se abrirán nuevos agujeros en la red que protege a los más pobres.

"Es mi responsabilidad asegurar que conseguimos una parte justa del dinero federal", dijo el pasado lunes. El plan de incentivos de Obama para salir de la recesión ya incluía partidas para los gobiernos regionales y locales, pero se movilizan con lentitud.

California ya rozó el pasado verano la bancarrota. El paro (12,5% en octubre) y el colapso inmobiliario están mermando los ingresos de una forma alarmante. Y la situación no tiene visos de mejorar a medio plazo. La California de Schwarzeneger es la Grecia de la zona euro o el Dubai de Oriente Próximo, o peor incluso.

Pero sobre todo es el espejo de los problemas fiscales que afrontan otras regiones del país, como Nevada, Arizona o Nueva Jersey. "Los gobiernos locales y estatales no son inmunes a los efectos de la contracción económica", señala Standard & Poors, un problema que durará años, por eso pide ajustes en el gasto y en los ingresos.