EX LESBIANA PIERDE CUSTODIA DE SU HIJA BIOLOGICA TRAS CONVERTIRSE AL CRISTIANISMO



Lisa Miller después de dejar su vida lésbica y convertirse al cristianismo, insólitamente pierde a su hija biológica, debido a que ésta negó en reiteradas ocasiones la visita de su ex-pareja lesbiana por considerar las prácticas homosexuales dañinas para su hija.
Estados Unidos | Jueves 14 de Enero, 2010 | Por Khelly Ramos de Vaca.


(NoticiaCristiana.com). En el año 2002, Lisa Miller a través de la inseminación artificial concibió a Isabella cuando había formalizado su unión civil con otra mujer, Janet Jenkins. Después de transcurrido un año del matrimonio lésbico, Miller se convirtió al cristianismo, por lo que, decidió abandonar el lesbianismo y separarse de Jenkins, así que esta última inició un proceso legal solicitando la custodia de la niña en un tribunal de Vermont, alegando que la ley de unión civil homosexual de dicho Estado le garantiza sus derechos parentales. De manera que el juez William D. Cohen, de la Corte de Familia de Vermont permitió a Jenkins, derechos de visita muy considerables, sin embargo, a la negativa de Miller -ahora siendo cristiana- permitir que su hija conviviera con prácticas homosexuales a su alrededor desacató el régimen de visitas que se le impuso, situación que llevó al tribunal a concederle la custodia a Jenkins, quien seguía con su vida lésbica.

Jenkins añade a toda esta situación que para su hija no es conveniente vivir en una atmósfera de cristianismo, a pesar de no haber tomado parte activa en la vida de la niña durante los últimos cinco años en relación a sus presentaciones escolares o simplemente una fiesta de Navidad, momentos trascendentales para la vida de un niño, en lugar de ello, ahora la niña se queja ante su madre biológica que Jenkins la obliga a bañarse junto a ella y desnuda.

Todo esto hace que Miller se sienta aún más insegura con la educación que comienza a recibir su hija cuando por derecho constitucional ella puede decidir cómo educar a sus hijos.

La situación se torna difícil porque en los EE.UU. cada Estado decide y define su posición ante las uniones homosexuales.

Fuente: Protestantedigital.com