RATZINGER SE REUNE CON LA CONGREGACIÓN PARA LA DOCTRINA DE LA FE ANTIGUAMENTE LLAMADA LA SANTA INQUISICIÓN



La Congregación para la Doctrina de la Fe es un órgano colegiado del Vaticano cuya función, custodiar la correcta doctrina católica en la Iglesia, está definida según el Artículo 48 de la Constitución Apostólica sobre la Curia Romana Pastor bonus, promulgada por Juan Pablo II el 28 de junio de 1988. Esta Congregación es la sucesora de la antigua "Sagrada Congregación de la Romana y Universal Inquisición", fundada por Pablo III en 1542 bajo la influencia del Cardenal Giovanni Pietro Carafa, quien años más tarde se convertiría en el Papa Pablo IV, y en cuyo Pontificado el Santo Oficio se convertiría en su arma más poderosa. Renombrada por San Pío X en 1908 como "Sagrada Congregación del Santo Oficio" y a la que Pablo VI en 1965 le dio su nombre actual respondiendo a numerosas quejas sobre la Inquisición,[1] aunque ha sido antecedido con el término Sagrada (Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe)[2] hasta la reforma del Código de Derecho Canónico de 1983, que lo excluyó de los nombres de las congregaciones vaticanas.

Contaba con veinticinco miembros —cardenales, arzobispos y obispos— y estuvo presidida desde 1981 por el que fuera Cardenal Joseph Ratzinger, hasta que en el último cónclave fue elegido el actual papa, Benedicto XVI. Éste nombró como sucesor en la presidencia de la Congregación para la Doctrina de la Fe al arzobispo norteamericano William Joseph Levada el 13 de mayo de 2005, que luego fue también elevado a la categoría de cardenal en el Consistorio del 24 de marzo de 2006. El cardenal Levada era miembro de esta congregación desde 1976.